VIDEO: Manifestantes chilenos queman las pertenencias de familias venezolanas en marcha antimigrante

Colchones, ropa, pañales, coches y juguetes para bebé, documentación y tiendas de campaña de inmigrantes venezolanos, fueron quemados en manifestaciones antinmigrantes.
Redacción Vistazo
Colchones, ropa, pañales, coches y juguetes para bebé, documentación y tiendas de campaña de inmigrantes venezolanos, fueron quemados en manifestaciones antinmigrantes.

Colchones, ropa, pañales, coches, juguetes para bebé, documentación y tiendas de campaña, estos artículos fueron quemados en manifestaciones antinmigrantes en la ciudad de Iquique, en Chile. Le pertenecían a un grupo de 30 inmigrante venezolanos -entre ellos siete bebés aproximadamente- que se habían asentado en una plaza, donde vivían en condiciones precarias e insalubres.

“Nos quemaron todas las pertenencias, todo. Los papeles, todo. Se llevaron a uno de mis cachorros. No pudimos sacar nada”, contó entre lágrimas una mujer venezolana que perdió todas sus pertenencias. “Lo que nos hicieron no se le hace a un ser humano”, agregó.

Cinco mil chilenos asistieron este sábado a protestar a 1.750 kilómetros de la capital chilena. Los ciudadanos expresaron su inconformidad por el ingreso masivo de inmigrantes a través de pasos no habilitados.

El día anterior a la marcha, las autoridades desalojaron a una decena de familias que acampaban en lugares públicos. Esta acción llevó a un enfrentamiento que terminó con 14 personas detenidas y cinco policías heridos.

Rodrigo Delgado, ministro del Interior de Chile, aseguró que los desalojos ya estaban previstos y se seguirán haciendo. "No está permitido utilizar los espacios públicos que tienen fines de esparcimiento, de recreación, para instalar viviendas transitorias”, explicó Delgado.

Primero se realizó el desalojo y luego se dio la marcha -que fue organizada a través de redes sociales-, los manifestantes salieron con banderas de Chile y de otros pueblos indígenas de Latinoamérica, según se puede observar en fotos y videos. Se dirigieron hasta el edificio donde se encuentra el representante del Gobierno en la ciudad, y desde ahí gritaron frases antinmigrantes y cantaron su himno nacional. Por último, empezaron una fogata, en la que incineraron las pertenencias de aproximadamente 10 familias venezolanas.

El Relator Especial sobre los Derechos Humanos de la migrantes de la ONU, Felipe González, calificó lo sucedido como "una inadmisible humillación”. De acuerdo con la socióloga chilena, María Emilia Tijoux, el país tiene "un modo de ser nacional y racista” que ha sido registrado en episodios públicos de discriminación y varios estudios académicos.

SITUACIÓN MIGRATORIA

A través del paso Colchane -al norte de Chile en el límite con Bolivia- pasaron de forma irregular 370 personas en junio y en septiembre la cifra se elevó a 1.826, según estimaciones del Gobierno chileno.

El informe anual del Servicio Jesuita de Migrantes (SJM) anunció que el flujo migratorio en Chile venía creciendo hasta 2017, pero empezó a disminuir en 2018. Además, menciona que el número de inmigrantes bajó aún más con el cierre de fronteras debido a la pandemia de COVID-19.

“Pero si bien existió una baja en los ingresos de extranjeros a Chile, se modificó la manera de migrar hacia una más precaria y vulnerable: así, solo entre enero 2018 y enero 2021 se dan más de 35.400 ingresos por paso no habilitado, concentrando el 79% de estos registros desde 2010″, se explica en el informe. La organización afirma que “son también venezolanos y haitianos quienes más aumentaron el ingreso irregular, los primeros en un 134.622% en tres años (enero 2018-enero 2021)”.

En los datos oficiales del Gobierno se registra que en el país residen 1'462.103 extranjeros, en su mayoría venezolanos con un 30,7% del total. Algunos sectores responsabilizan al mandatario Sebastián Piñera por la creación de la visa de "responsabilidad democrática" en 2018.

Sin embargo, el Gobierno explica que lo que se ha hecho tiene el propósito de "ordenar la casa" para llevar una migración sin irregularidades, debido a que la ley antigua de migración, data de 1975 en el régimen de Augusto Pinochet, y no estaba adecuada para la situación migratoria actual.

Los investigadores Claudia Silva, Constanza Lobos y Nicolás Rojas de la Organización Internacional para las Migraciones, afirman que la población migrante disminuyó progresivamente en los años de dictadura hasta llegar al mínimo histórico de 0,7% en 1982.