Terremoto en Turquía: Padre se sacrifica por su hijo al protegerlo mientras todo a su alrededor se derrumba
Una semana después de los terremotos que asolaron el sureste de Turquía, los equipos de rescate han podido localizar con vida a varias personas entre los escombros, este lunes 13 de febrero.
Algunos expertos advierten de que puede haber hasta 150 mil cuerpos aún bajo los restos de miles de edificios que se redujeron a escombros.
Ante esos rescates, siete días después del los sismos de magnitud 7.7 y 7.6, que arrasaron miles de edificios y han dejado ya más de 35.000 muertos en Turquía y Siria, autoridades han pedido que se tenga cuidado con las labores de desescombro por la posibilidad de que haya supervivientes.
Mientras se realizaban dichas operaciones con cautela, un grupo de rescatistas hallaron a un hombre que había fallecido mientras rodeaba sus brazos sobre algo y lo cubría con su espalda.
Tras observar la escena de cerca, el equipo se percató de que había un brazo pequeño que sobresalía del montón de escombros que había cubierto al sujeto.
Miren este video.Un padre dio la vida por su hijo cubriéndolo en el #Terremoto #Turquia #Siria ... cuando los rescatadas remueven el cuerpo debajo encuentran al hijo creyendole muerto también,el niño abre los ojos, ellos gritan: "Ala es grande"
— An Angel (@utopiarealvane) February 9, 2023
2 veces le dio la vida a su hijo pic.twitter.com/fXUEBqNBMS
Tras retirar al hombre con cuidado, ya sin vida, los rescatistas tomaron la mano del pequeño y la halaron hacia adelante, mientras miraban ensimismados y se escucha un cántico lejano de "¡Allahu Akbar!" (Dios es grande).
De inmediato, el cuerpo del infante salió sin ninguna herida considerable de la pila de paredes y techos derruidos. Tras recibir el primer rayo de sol en casi una semana, sus ojos se abrieron y, tan pronto sucedió aquello, los gritos de "¡Allahu Akbar!" se multiplicaron.
El padre lo habría protegido hasta el último segundo de su vida. Aquello permitió que el niño, de aparentemente 6 años, sobreviviera, al tener suficiente espacio para respirar y no haber sido impactado por nada.
El balance confirmado es de 35.224 muertos, 31.643 en Turquía y 3.581 en Siria, lo que convierte a este cataclismo en el quinto más mortífero desde el inicio del siglo XXI