¿Qué significan los trapos rojos colgados en algunas casas durante la cuarentena, en Colombia?
2020/04/2007:46H.
En Altos de Cazucá, comuna de Soacha, de 1.200.000 habitantes en el suburbio de Bogotá, muchas familias han puesto un trapo rojo para informar que necesitan ayuda. Un trapo rojo como grito de auxilio que se repite en la fachada de viviendas informales en este inmenso cerro, y que empieza a esparcirse por el país como un nuevo símbolo de protesta contra la pobreza que vive el séptimo país más desigual del mundo, según el Banco Mundial.
Ruth Grisales, madre soltera de un niño, llegó hace 7 años a Bogotá huyendo de la violencia y la falta de trabajo de su pueblo. Hasta la cuarentena, trabajaba cada día de la semana en una casa distinta del norte acomodado de la ciudad como empleada doméstica. Ella comentó para BBC Mundo, "Mis trabajos se terminaron y ninguno de los patrones se ha dedicado ni a llamarme a preguntar cómo estoy.”
Su caso no es muy diferente del que viven sus vecinos, y millones de colombianos, en un país donde la mitad del empleo es informal y está ahora congelado por la cuarentena.
En la cuadra de Soacha donde vive Grisales, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) reporta una pobreza multidimensional del 60%: más de la mitad de la gente tiene carencias no solo de ingresos, sino de educación, salud y trabajo. Colombianos como Ruth, a los que se añaden la mayoría de los 2 millones de venezolanos que llegaron al país, son los más afectados por el estancamiento económico de la cuarentena. Para combatir esta situación, el gobierno colombiano ha aplicado subsidios, créditos blandos y suspensión de pagos.
También el municipio entrega bolsas con arroz, lentejas y harina en colegios y plazas donde la gente hace horas de fila.El alcalde del municipio, Juan Saldarriaga, dice haber pensado en la estrategia del trapo rojo para identificar a las familias más vulnerables y poder entregar la canasta básica sin necesidad de entrevistas y burocracia. El acalde de Soacha añade: "Este el rojo del trabajo honesto y humilde, el de la bandera (de Colombia), el de la sangre que derramaron los colombianos en busca de su libertad desde la independencia hasta hoy”, dijo para BBC. La realidad es que cada vez son más familias con un trapo rojo en sus ventanas, esperando que la pesadilla de la pandemia termine para que vuelvan a trabajar.