"No nos van a separar": Mujer rechaza la condena que su esposo recibió por golpearla durante una transmisión en vivo
A inicios de febrero, una escena de violencia doméstica se tornó viral en España, la cual involucró a una "Tiktoker", conocida como Simona, de origen búlgaro, y a su esposo, identificado como Floren.
En la grabación se puede apreciar como Simona recibe una fuerte bofetada por parte de su marido tras haber llamado "cariño" a un usuario, ante miles de espectadores y otros tres influencers que estaban conversando con ella en la transmisión.
El momento no pasó desapercibido ante las personas que se habían unido a ver la conversación de las personas, a pesar de que Simona se refería al hecho de forma jocosa mientras cubría su rostro y diciendo que lo que había sucedido no fue culpa de sus seguidores, sino de unas cosas por las que el hombre se habría enojado antes.
Cientos de acusaciones y amenazas hacia el hombre, que también es una personalidad en Tik Tok, llamada "Lucifer", fueron enviadas en cuestión de horas, lo cual instó a la pareja a acercase a una comisaría en Soria para interponer una denuncia.
No obstante, tras explicar la situación a los gendarmes, Floren fue detenido de inmediato y liberado poco después, con un proceso judicial abierto en su contra por violencia doméstica.
"Ha salido en libertad y todo está bien", aseguró Simona al medio En Boca de Todos en aquel entonces. "Lo importante es que estamos juntos. Ya está. No nos vais a separar, da igual lo que hagáis", acotó.
A finales de febrero, el hombre fue condenado a un año de prisión, a los que se adicionó una orden de tres años de alejamiento que le impedirá acercarse a su esposa, quien rechazó la decisión judicial.
"La juez ha estimado, una vez valorada la prueba en su conjunto, que el acusado, de una manera pública y notoria, ante miles de personas, agredió a su esposa, con intención de menoscabar su integridad física y de humillarla en público", informó el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.
"No nos podemos ver porque tengo que pensar en él, aunque tenga ganas de verle, besarle, abrazarle, aunque le eche de menos, no me puedo acercar a él", expresó en redes sociales, asegurando que no iba a estar feliz, porque su "felicidad" sería estar junto al "amor de su vida".
La postura de la mujer, reconocida como victima de violencia doméstica por el Gobierno de España, causó revuelo en redes sociales. Comentarios sobre el razonamiento de la mujer se acumularon, tildándolo por lo general como "absurdo".