Mujer fue condenada a prisión por estafar en GoFundMe: inventó una historia sobre un vagabundo
Una mujer aceptó haber inventado una historia sobre una persona sin hogar en GoFundMe para estafar con más de 400.000 dólares a los donantes. La originaria de Nueva Jersey fue sentenciada, el pasado jueves, a un año de prisión.
Se trata de Katelyn McClure, de 32 años, quien además deberá pagar una restitución y cumplir tres años de libertad supervisada, según documentos judiciales, que cita la cadena Univisión.
La insólita historia empezó en el 2017, cuando McClure y su entonces novio, Mark D'Amico, encontraron a un hombre cerca a un casino y le propusieron crear una historia sobre un veterano sin hogar, identificado como Johnny Bobbit, quien supuestamente le dio a la mujer sus últimos 20 dólares para pagar gasolina, cuando la mujer se quedó varada.
McClure publicó la foto del sujeto y ella en sus redes sociales, lo que rápidamente se hizo viral. Después, generaron una campaña de GoFundMe para recaudar fondos y sacar al hombre de la pobreza.
La historia tuvo tanto éxito que llegaron a registrar más de 14.000 donantes. Mientras que los estafadores obtuvieron cerca de 367.000 dólares.
Las autoridades se dieron cuenta de la estafa, cuando el supuesto buen samaritano, Johnny Bobbit, los denunció porque no le entregaron todo el dinero.
Tras investigaciones, se supo que la pareja conoció a Bobbit en una rampa de salida cerca de un casino al menos un mes antes de que se diera a conocer la historia y se lanzara la campaña GoFundMe.
La Policía tuvo acceso a los mensajes que se enviaba la mujer con su novio y un amigo, a quien le explicaba sus problemas económicos: "Está bien, espera, la parte del combustible está completamente inventada, pero el tipo no. Tuve que inventar algo para hacer que la gente se sienta mal".
La pareja gastó todo el dinero en un vehículo BMW y viajes a casinos en Las Vegas y Nueva Jersey durante el 2018.
El primer sentenciado fue el novio de la mujer, quien estará en prisión por cinco años, tras declararse culpable de cargos federales, pues aceptó ser el cabecilla del grupo.
En cambio, el supuesto mendigo, se declaró culpable de conspiración para cometer robo mediante engaño, pero fue condenado a un periodo especial de libertad condicional de cinco años que incluye tratamiento por drogas.