Masacre de jóvenes durante fiesta de cumpleaños en Estados Unidos deja al menos cuatro muertos y decenas de heridos

AFP y Redacción Vistazo
The Alexander City Outlook

Policías de Estados Unidos buscan información sobre el tiroteo que el fin de semana devastó un pequeño pueblo en el estado de Alabama, al dejar cuatro muertos y 28 heridos en la fiesta de cumpleaños de una adolescente.

El lunes por la mañana, 36 horas después de la tragedia, las autoridades estatales y locales aún no habían dado a conocer ningún detalle sobre un posible sospechoso o sospechosos, el motivo del tiroteo, las identidades y edades de las víctimas o cómo murieron.

Las autoridades no informaron si han detenido a algún sospechoso o si los tiradores siguen en libertad o murieron en el tiroteo del sábado por la noche que terminó con la calma de Dadeville, una comunidad muy unida de unos 3.000 residentes al noreste de Montgomery, la capital del estado.

El sargento Jeremy Burkett, portavoz de la Agencia de Cumplimiento de la Ley de Alabama (ALEA), confirmó a los periodistas el balance de muertos y heridos, y añadió que algunas víctimas permanecían en estado crítico.

Tres de las víctimas del tiroteo, que en su mayoría fueron menores de edad.

"Les aseguro que estamos haciendo todo lo posible" para avanzar en la investigación, dijo Burkett a la AFP el lunes.

Sin embargo, durante dos conferencias de prensa el domingo, las autoridades proporcionaron poca información y no respondieron preguntas, mientras que Burkett dijo que los investigadores estaban entrevistando a testigos.

"No vamos a precipitarnos al fracaso", dijo. "Esta también es una situación muy variable", agregó Burkett, mientras imploraba a los residentes que presenten información que pueda arrojar luz sobre lo sucedido.

"No puedo insistir lo suficiente en esto: necesitamos absolutamente que lo compartan", dijo el oficial.

El presidente Joe Biden, quien desde hace tiempo busca medidas de seguridad más estrictas con las armas, intervino el domingo para ofrecer sus condolencias y condenar la "indignante e inaceptable" violencia armada contra los niños.

Los funcionarios del hospital dijeron que la mayoría de los baleados eran adolescentes, y los testigos señalaron que las víctimas asistían a una fiesta de cumpleaños de "Sweet 16" (Dulces 16), evento similar al que celebran las quinceañeras hispanoamericanas, realizada en un salón de baile alquilado en la plaza de la comunidad.