Liberan a una monja colombiana secuestrada por yihadistas en Mali desde 2017

La monja, de la Congregación Hermanas Franciscanas de María Inmaculada, realizaba su labor humanitaria y de evangelización.
EFE

El Gobierno de Colombia confirmó este sábado la liberación de la monja Gloria Cecilia Narváez, quien había sido secuestrada en Mali en febrero de 2017 por un grupo yihadista y manifestó su alegría por la noticia dada por la Presidencia del país africano.

"Me alegra inmensamente la noticia de la liberación en Malí de nuestra querida compatriota, la religiosa Gloria Cecilia Narváez, un objetivo que en el Gobierno Nacional nos habíamos trazado y por el que con el presidente (Iván) Duque veníamos trabajando desde hace muchos meses", manifestó la vicepresidenta y canciller, Marta Lucía Ramírez, en un comunicado de su despacho.

La alta funcionaria aseguró que el Gobierno tuvo "múltiples conversaciones y solicitudes de ayuda internacional" y que Duque se reunió personalmente con varios líderes africanos buscando su liberación.

Ramírez agradeció especialmente la ayuda de los presidentes de Mali, Senegal y Ghana, y destacó la ayuda que brindó al Gobierno el expresidente Andrés Pastrana (1998-2002).

"Celebramos el regreso a la libertad de la hermana Gloria Cecilia Narváez Argote después de tantos años de cautiverio. Gracias a Dios pronto podrá estar usted junto a sus seres queridos", expresó Pastrana en Twitter.

La Presidencia de Mali, en un comunicado, saludó "el coraje y la valentía de la hermana" y afirmó que su liberación es fruto de cuatro años y ocho meses de esfuerzos conjuntos de varios servicios de inteligencia.

El presidente de ese país, Assimi Goita, quien recibió hoy a la religiosa después de su liberación, afirmó que "aún se están realizando esfuerzos para liberar a todas las personas, tanto malienses como extranjeras, retenidas en el territorio de Malí".

EL CASO DE NARVÁEZ

La religiosa fue secuestrada el 7 de febrero de 2017 en Karangasso, en el suroeste de Mali, en las zonas fronterizas con Costa de Marfil y Burkina Faso.

La monja, de la Congregación Hermanas Franciscanas de María Inmaculada, realizaba su labor humanitaria y de evangelización en el continente africano en Benín y posteriormente en Mali.

En diciembre de 2018 el grupo yihadista Nusrat al Islam wal Muslimin (Grupo de apoyo al islam y a los musulmanes), activo en la región del Sahel y aliado con Al Qaeda, publicó el nombre de cinco rehenes que tenía secuestrados, entre ellos la monja colombiana.

En Mali actúan distintos grupos yihadistas que tienen entre sus blancos al ejército regular y las fuerzas de la misión de la ONU (Minusma), y que recurren a secuestros para obtener fondos o liberaciones de sus miembros encarcelados.

APOYO DE FRANCIA

La vicepresidenta Ramírez, que está en Francia, señaló que analizó junto a representantes del Gobierno de ese país las pruebas de supervivencia más recientes que había de la monja colombiana.

"En nuestras entrevistas con la ministra de Defensa, Florence Parly, y el primer ministro, Jean Castex, acompañada del embajador Mauricio Vargas, reiteramos el pedido de ayuda", expresó la vicepresidenta y canciller colombiana, que valoró también el apoyo de ese país.