La impactante marca que le quedó a un niño tras ser succionado por la depuradora de una piscina en España
España vive una intensa ola de calor, sobre todo en el sur del país, por ello los ciudadanos acuden con regularidad a piscinas para refrescarse. Sin embargo, hace pocos días estuvo a punto de ocurrir una tragedia en una alberca municipal de Jaén, en Andalucía.
Blas, de ocho años, estaba disfrutando de una piscina de aproximadamente 49 centímetros de profundidad. Antes ya había acudido en varias ocasiones con su familia y nunca habían sufrido ningún percance. De hecho, junto al menor estaban otros niños e incluso bebés.
Todo transcurría con normalidad, pero en un momento, el pequeño se sumergió en el agua y empezó a agitar aceleradamente los brazos.
Fueron momentos de mucha tensión, puesto que la socorrista del lugar no sabía cómo actuar.
“No sabemos ni cómo ocurrió. Mi hijo se quedó atrapado debajo del agua porque la depuradora de la piscina lo succionó y no le dejaba salir a la superficie”, relató Encarni, madre del niño, a medios locales, según cita Antena 3.
Por suerte, Blas logró salir del agua y escapar a la presión que estaba hundiendo su cuerpo.
El menor lucía pálido y tenía los labios blancos, pero causó sorpresa la terrible marca que había quedado en su espalda.
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"Cuando le miramos la espalda la tenía entera morada", dijo su madre. Y es que la marca parecía un tatuaje en toda su espalda.
Blas fue llevado a un hospital, en donde le diagnosticaron un fuerte hematoma. Mientras que su estado de salud era positivo, aunque el niño se encontraba nervioso, según informa Antena 3.
La familia no entendía por qué estaba prendida la depuradora de la piscina sabiendo que había pequeños disfrutando del agua.
Por ello, interpuso una denuncia en la comisaría de la Guardia Civil, que ordenó el cierre temporal de las instalaciones.