Informan el estado de Enner Valencia tras devastador terremoto en Turquía, donde juega el futbolista
La serie de potentes terremotos que ha sacudido la zona fronteriza entre Turquía y Siria ha dejado de momento 2.509 muertos y más de 12.100 heridos en los dos países, y ha derruido miles de edificios.
Al menos 1.541 personas han muerto y otras 9.733 han resultado heridas en Turquía, según indicó el vicepresidente turco, Fuat Oktay, en el recuento más actualizado.
Otkay señaló que más 3.700 edificios han quedado destruidos o muy dañados, y que el Gobierno quiere iniciar mañana la evacuación controlada de quienes necesiten salir de las diez provincias más afectadas por el desastre.
Mientras que, en Siria, inmersa en más de una década de guerra civil, la zona afectada se divide entre el territorio controlado por el Gobierno de Bachar al Asad y el último enclave del país controlado por la oposición, que está rodeado por fuerzas gubernamentales respaldadas por Rusia.
La tragedia también ha causado preocupación debido a que el futbolista de la Tricolor, Enner Valencia, milita en un equipo local de ese país.
Y es que el actual delantero del club Fenerbahce, de 33 años, reside con su familia en Turquía, donde se registró el epicentro.
Sobre el estado del ecuatoriano, el representante del jugador, Gonzalo Vargas, dio a conocer que Valencia y su familia se encuentran bien.
“Lamentable noticia sobre el terremoto en Turquía el epicentro no fue en Estambul. Gracias a Dios, Enner Valencia y su familia se encuentran bien”, escribió en su cuenta de Twitter.
Por su parte, la Federación Turca de Fútbol anunció este lunes el aplazamiento de los partidos del campeonato local como consecuencia del potente terremoto.
"Tal como anunció nuestro ministro de Juventud y Deportes, las competiciones deportivas han sido aplazadas. Por ello debemos aplazar los partidos de nuestras ligas de fútbol", indicó la Federación, sin precisar la fecha en las que se reanudarán los campeonatos.
AUMENTARÁ EL NÚMERO DE VÍCTIMAS
El primer gran terremoto se registró a la 4.17 horas (01.17 GMT) y tuvo una magnitud de 7,7 grados, según el servicio de emergencias turco Afad, con epicentro en Pazarcik en la provincia turca de Kahramanmaras.
Posteriormente se produjeron hasta 145 temblores más, uno de ellos de magnitud 7,6 a las 10.24 GMT
"Es el sismo más fuerte desde el terremoto de Erzincan de 1939. Según las últimas evaluaciones es de 7,7. Hay graves daños también en las zonas vecinas de Siria", dijo Erdogan.
"Debido a que continúan las labores de desescombro en muchos edificios de la zona del terremoto, no sabemos a cuánto ascenderá el número de muertos y heridos", declaró Erdogan.
Las bajas temperaturas y la nieve en la zona, donde también hay territorios montañosos de difícil acceso, complican las tareas de rescate.
Con todo, en la provincia de Kahramanmaras, una mujer de 18 años ha sido localizada con vida 12 horas después del temblor, y en Diyarbaki, un hombre fue rescatado tras 14 horas atrapado, informa la agencia Anadolu.
Según Afad, no hay riesgo de tsunami en su costa del Mediterráneo, y las autoridades turcas han indicado que, pese a que se han producido algunas grietas, los embalses de las zonas más afectadas no han sufrido daños estructurales.
Uno de los símbolos de la enorme destrucción del sismo es el histórico castillo romano de Gaziantep, que llevaba en pie más de 1.700 años y que ha sido arrasado por el temblor.
También ha sufrido daños la ciudadela histórica de Alepo, en Siria, Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
Las autoridades turcas han anunciado el cierre de los colegios en las diez provincias más afectadas y también se han suspedido todas las competiciones deportivas.