Advierten de que hay hasta 150.000 cuerpos aún bajo los escombros en Turquía
Una semana después de los terremotos que asolaron el sureste de Turquía, los equipos de rescate han podido localizar hoy con vida a varias personas entre los escombros, mientras que algunos expertos advierten de que puede haber hasta 150.000 cuerpos aún bajo los restos de los miles de edificios derruidos.
Una mujer de 40 años pudo ser localizada con vida después de 170 horas atrapada entre los restos de una vivienda en la ciudad de Gaziantep, mientras que en Antakya, un hombre fue encontrado con vida.
También fue localizado vivo un menor de edad, informó la emisora TRT.
Ante esos rescates, siete días después del los sismos de magnitud 7,7 y 7,6, que arrasaron miles de edificios y han dejado ya más de 35.000 muertos en Turquía y Siria, algunos expertos han pedido que se tenga cuidado con las labores de desescombro, tanto por la posibilidad de que haya supervivientes como para no dañar los cadáveres de las víctimas.
"¿Por qué remover los restos tan pronto? Se puede seguir con vida hasta diez días después", ha advertido en Twitter Ahmet Ovgun Ercan, un prestigioso geofísico de la Universidad Técnica de Estambul.
Este experto señala que, tras ese tiempo, las víctimas ya no pueden gritar ni apenas moverse, por lo que es más difícil indicar que están vivos a los equipos de rescate.
Además, estima que puede haber aún 155.000 cadáveres entre los escombros.
Ercan afirma que la excesiva prisa por remover los restos de los edificios fue un grave error en el terremoto de 1999 cerca de Estambul, en el que murieron unas 18.000 personas.
El balance confirmado es de 35.224 muertos, 31.643 en Turquía y 3.581 en Siria, lo que convierte a este cataclismo en el quinto más mortífero desde el inicio del siglo XXI.
La ONU denunció el fracaso del envío de ayuda para Siria, un país ya devastado por más de una década de guerra.
En Siria el registro de fallecidos permanece estable desde hace días, por lo que el balance puede subir y con cada día que pasa disminuyen las posibilidades de encontrar supervivientes.
En la localidad turca de Kahramanmaras, cerca del epicentro, se instalaron 30.000 tiendas de campaña y hay 48.000 damnificados en escuelas y otras 11.500 personas albergadas en centros deportivos.