Hoteles en Ecuador adaptan su propuesta de hospedaje por el COVID

La nueva realidad provocada por el COVID-19 ha trasformado completamente la operatividad del sector hotelero. Protocolos de limpieza, implementos de desinfección en cada área, espacios que faciliten el distanciamiento social y la reducción del contacto, son parte de las acciones que hoy siguen los establecimientos para garantizar lugares seguros y saludables.

 

La digitalización es uno de los cambios más adoptados. El Hotel Unipark de Guayaquil, por ejemplo, utiliza la tecnología para fortalecer el distanciamiento, pues, su proceso de ingreso y salida de huéspedes ahora es digital y se lo realiza a través de su plataforma online para evitar el contacto de las personas. Para quienes prefieren el registro tradicional, la recepción cuenta con pantallas de metacrilato y recipientes con alcohol para depositar las llaves. A su ingreso el visitante recibe un kit con mascarilla, toallita y gel antibacterial.

 

El gerente general, Marcelo Ferrari, cuenta que el desayuno y la cena se sirven en las habitaciones; mientras que el almuerzo se lo ofrece en el restaurante a través de un menú digital. Para garantizar el distanciamiento, las mesas fueron separadas con biombos. En lo que respecta al aseo de las habitaciones, éste se lo realiza acorde al requerimiento de los huéspedes; una vez que estas se desocupan entran a un proceso de limpieza y ozonificación.

 

Para incentivar su ocupación Hotel Unipark ha fijado tarifas 2x1 (70 dólares más impuestos y desayuno), fines de semana románticos con desayunos y cenas incluidas (80 dólares más impuestos), entre otras promociones.

 

“Se implementó también un servicio de alojamiento mensual en una de nuestras torres, a las que equipamos suites con diferentes modalidades y preferencias de alquiler. El delivery es algo en lo que no trabajábamos mucho, pero hoy se ha convertido en nuestro principal punto de venta, debido a la seguridad e higiene que transmitimos a través de este nuevo servicio”, manifiesta Ferrari.

 

 

Los establecimientos del Grupo SIXSTAR Hotels, conformado por Wyndham Quito Airport, Garden Quito y Garden Guayaquil, también se mantuvieron operativos durante la emergencia sanitaria, brindando hospedaje a quienes tenían que realizar cuarentena antes de regresar a sus hogares.

 

Daniela Luna, gerente de Marketing y Ventas del Grupo, cuenta que, ante la disposición del Comité de Operaciones de Emergencia de abrir los principales aeropuertos del país desde junio, los hoteles de la agrupación decidieron unirse a la reactivación del sector y recibir nuevamente a clientes y público. Para ello, se invirtió en la incorporación de procesos de bioseguridad, tales como protocolos de salud, seguridad e higiene; uso equipos de protección, colocación de dispensadores de gel antibacterial y desinfectantes en todas las áreas y habitaciones, así como la redistribución de espacios con nuevos parámetros de distancia.

 

En instalaciones de uso común, por ejemplo, se desinfectan áreas y superficies cada hora; en los ascensores se ha especificado una capacidad máxima de ocupantes, y a los trabajadores se les provee de trajes de protección de bioseguridad de forma periódica y se les realiza un monitoreo constante de salud.

 

Para minimizar los puntos de contacto y la manipulación de documentos entre colaboradores y huéspedes, el Grupo creó el Web Check In, el cual permite un registro previo a la llegada y la posibilidad de solicitar servicio de alimentación a la habitación, a través de una plataforma digital. Asimismo, incorporó un menú digital en su restaurante, accesible mediante un código QR, a más de herramientas de pago sin contacto. “Los hoteles están brindando el servicio de restaurante en las instalaciones del hotel y también a domicilio con todos los protocolos y la calidad que los caracteriza”, detalla Luna.

 

Con similares protocolos, el Mercure Hotel Alameda Quito también busca cubrir las necesidades actuales de los viajeros y clientes. Su directora general, Marisol Mosquera, explica que cada área tiene un procedimiento distinto de seguridad, en las zonas de alimentos y bebidas, por ejemplo, se garantiza el distanciamiento de mesas, así como una desinfección permanente.

 

“Pensando y aceptando que después de esta pandemia nada será igual, el Mercure Hotel Alameda se ha preparado para recibir un huésped mucho más exigente, con personal altamente empático y capacitado para atender sus necesidades, brindando toda la seguridad de estar en un lugar libre de COVID-19”, resalta Mosquera.

 

Para incentivar la llegada de los viajeros, el establecimiento tiene vigentes promociones con precios reducidos, como el 3x2 (tres noches por el precio de dos); tarifas de verano con alimentación completa incluida, y de larga estadía, así como el room office, un espacio de oficina por un día en la comodidad y privacidad de una habitación.

 

Un resort que reactivó sus actividades para acoger de manera segura a los turistas es el Hotel Decameron Mompiche, en Esmeraldas. Este complejo turístico abrió sus puertas en julio de la mano de un plan integral de bioseguridad llamado ‘Decameron Health Inclusive’.

 

El diseño de este protocolo, explica su presidente, Fabio Villegas, contó con el apoyo de asesores especializados y contempla cinco pilares: toma de temperatura; cultura de higiene y lavado de manos; personal protegido; distanciamiento físico y limpieza y desinfección; así como nuevos modelos de ocupación y uso de zonas comunes como piscinas, playas y áreas de esparcimiento para facilitar el distanciamiento.

 

Para celebrar su apertura el resort pone a disposición de los visitantes el uso anticipado de sus instalaciones de manera gratuita a partir de las 10h30, en lugar del horario habitual de 15h00, a más cajilla de seguridad y up grade para habitación con vista al mar gratis.

 

Asimismo, sumó una política de ‘reservas flexibles’ para este año. “Estamos preparados para ofrecer un servicio renovado, pensado en brindar experiencias únicas y memorables a nuestros huéspedes, y concebido para garantizar la atención en salud y seguridad que nos demandan las necesidades del momento”, destaca Villegas.