El programador sueco Ola Bini fue sentenciado a pasar un año en prisión después de que la Sala de Apelación de la Corte Provincial de Pichincha revocó la resolución judicial que ratificó su inocencia frente al cargo de ser culpable del delito de acceso no consentido a un sistema informático, en grado de tentativa.
Los jueces aceptaron el recurso de apelación presentado por Fiscalía e impusieron, además de la orden de encarcelamiento, detenido en abril de 2021, por supuestamente acceder de forma ilícita al sistema de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT), el pago de una multa superior de casi 1850 dólares.
"La jueza ponente, Narcisa Pacheco, señaló –en su resolución oral– que los elementos analizados en la diligencia dan cuenta de que el procesado actuó con conocimiento, voluntad y conciencia, para ejecutar actos idóneos, conducentes", informó el Ministerio Público por medio de un comunicado difundido en redes sociales.
De esta forma, la resolución que había alcanzado un tribunal de Pichincha en enero del 2023, la cual concluyó que la Fiscalía y el CNT no probaron sus teorías y que se registraron indicios de ilegalidad en la investigación, lo cual devino en que Bini, de 41 años, fuera declarado inocente, quedó sin efecto.
El programador vivía en Ecuador desde el 2013 y trabajaba en el campo del software. Después de que el Gobierno retiró el asilo concedido a Julian Assange, fundador de WikiLeaks, un ciudadano reportó que un colaborador de dicha red de filtración de datos, quien era Bini, estaba en el país. Su retención se llevó a cabo en el aeropuerto de Quito. Tras ser investigado inició el caso que llega a una de sus fases finales hoy, con la sentencia condenatoria.