Varias medidas de seguridad se analizan para aplicarlas en distintos centros médicos del país, tras las siete incursiones armadas registradas en 2022, la más reciente a finales de noviembre, cuando delincuentes tomaron cuatro rehenes, que luego fueron liberados con vida.
El ministro de Salud, José Ruales, dijo este martes que trabajan en "varios mecanismos para poder responder".
"Hemos tenido ya siete eventos de estos con incursiones armadas en este año. Tenemos otros eventos, incluso, de extorsión a nuestro personal en algunos barrios, en algunas comunidades rurales. Delincuencia común, robos a nuestros establecimiento de salud, etcétera", indicó.
Ante esa situación, se han reunido con representantes del Ministerio del Interior, de la Policía, del ECU 911, para "formular varias estrategias", comentó el ministro, al agregar que hoy presentarán el plan de acción y cronograma y se definirá el llamado "Código Plata".
Dicho código es la identificación de riesgos, muchas veces desde el momento en que se solicita la atención o el traslado de un paciente que sufrió herida de arma de fuego, arma blanca, o si fue una confrontación entre bandas de delincuentes, o que ingresa por ese motivo al hospital, o también si hay una amenaza armada.
Ruales comentó -además- que al momento identifican las "zonas calientes", en referencia a los lugares donde hay delincuencia común o amenazas al personal, para reforzar con varias medidas, desde "detectores metálicos, de armas, como la inclusión de video vigilancia, que tampoco tenemos en todos nuestros establecimientos".
Asimismo, el patrullaje disuasivo, la intervención en lugares donde se sabe que hay bandas de delincuentes que amenazan al personal médico.
"No todos los establecimientos del país tienen el mismo riesgo y no todo el personal, pero sí algunas brigadas, incluso brigadas de vacunación, que han sido afectadas", anotó.
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TOMA DE REHENES
El pasado 27 de noviembre, el presidente Guillermo Lasso informó de la detención de siete personas que habían entrado armados en un hospital y tomado varios rehenes.
"Debo destacar el notable trabajo de la Policía en el Hospital Napoleón Dávila, de Chone. Su intervención logró detener a los 7 delincuentes, liberar 4 rehenes y salvar vidas", dijo entonces Lasso.
Según las autoridades, los siete delincuentes fuertemente armados, intentaban asesinar a un menor de edad, alias "Cara sucia", quien estaba ingresado en esa casa de salud con heridas luego de que habían atentado contra su vida.
El comandante general de la Policía, Fausto Salinas, detalló que en el operativo en el hospital se retiraron dos fusiles calibre 5-56, tres escopetas calibre 12, una subametralladora calibre 9 milímetros y un revolver calibre 38, entre otros.
Anotó que "Cara sucia" estuvo "involucrado en algunos hechos delictivos".