El padre venezolano que perdió a su hija por femicidio en Ecuador, pudo recuperar a su nieto
"Estoy agradecido con Dios y con el Movimiento de Mujeres de El Oro, por haber recuperado a mi nieto, la alegría es desbordante", expresó Pedro Valenzuela, padre de una víctima de femicidio.
Luego del femicidio en Huaquillas de la venezolana Fransheska Valenzuela Bastidas, su padre inició un proceso judicial de patria potestad para poder hacerse cargo del bebé que quedó huérfano a sus cinco meses.
El pasado jueves 21 de octubre, luego de 4 meses del proceso, Pedro Valenzuela y su nieto Israel pudieron partir de regreso a Venezuela.
Valenzuela llegó a Ecuador en mayo de este año para sepultar a su hija, quien había dejado La Güaira en busca de una mejor vida.
El hombre dice estar contento por recuperar a su nieto, pero triste porque las investigaciones sobre la muerte su hija no han avanzado.
“Estoy agradecido con Dios y con el Movimiento de Mujeres de El Oro, por haber recuperado a mi nieto, la alegría es desbordante, luego de cuatro meses de lucha logramos conseguir que la jueza nos diera la custodia de nuestro nieto, pronto regresaré a mi tierra” dijo Valenzuela al portal Diario Correo.
“Mi nieto es ciudadano ecuatoriano por nacimiento y una vez que lleguemos a Venezuela se comenzará con los seguimientos con la institución llamada IDENA, la par del MIES acá en Ecuador. Con visitas constantes se verificará el estado del niño y se informará a las autoridades ecuatorianas sobre el desarrollo que será el mejor, nada le faltará pues nosotros somos su familia”, explicó
El pequeño Israel había sido secuestrado por una pareja de compatriotas venezolanos luego de la muerte su madre, ellos lo llevaron hasta Perú. Sin embargo, el 7 de mayo repatriado y entregado a una familia en Arenillas como hogar temporal, según el protocolo del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES).
De acuerdo a lo establecido, el menor debía ser entregado por el hogar temporal a su familia biológica, pero por las circunstancias del caso de Israel, el proceso judicial fue más largo y su abuelo tuvo que someterse a algunas pruebas como un examen de ADN.
Pedro Valenzuela fue acogido durante todo el proceso por el Movimiento de Mujeres de El Oro (MMO), quienes también le proporcionaron asesoramiento legal y ayudaron a que fundaciones y organizaciones internacionales intervengan también en el proceso.
A causa de la extensión del proceso judicial, Valenzuela perdió un vuelo humanitario que estaba disponible en julio para volver, junto a su nieto, a casa con su esposa y demás hijos. Por eso, emprendió el viaje a su país por vía terrestre, ya que no cuenta con los recursos suficientes para comprar un pasaje aéreo.
“El Estado no solamente debió entregar a Israel a su abuelo, sino también debió dictarse como medida compensatoria que se disponga su regreso a La Güaira por vía aérea”, dijo Rosa López, integrante del MMO y resaltó que en este caso ve reflejada la dura realidad por la que tiene que pasar la familia de las víctimas de violencia de género.
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