En un esfuerzo conjunto por combatir la desnutrición y promover una alimentación saludable entre los estudiantes, el Ministerio de Educación de Ecuador y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) han dado un paso adelante con la firma de un memorando de entendimiento para implementar un nuevo modelo de alimentación escolar.
Este programa, que promete entregar raciones frescas y nutritivas, se enfocará inicialmente en beneficiar a los estudiantes de las provincias de Pichincha, Manabí y Guayas.
La colaboración, oficializada el pasado martes, marca el comienzo de una estrategia territorial que busca no solo alimentar a los estudiantes sino también activar la economía local mediante la inclusión de los productores locales y la participación activa de las familias en el proceso de preparación de los alimentos.
El Ministro de Educación, Daniel Calderón, y Matteo Perrone, representante del PMA, formalizaron el acuerdo durante una visita a la Unidad Educativa Carlos Montúfar en el cantón Bolívar, provincia de Carchi.
Esta localidad ya experimenta los beneficios de una iniciativa similar que abarca a 53 instituciones educativas, demostrando el potencial del programa para transformar la alimentación escolar en el país.
El nuevo modelo se distingue por su enfoque en el consumo de productos locales, respetando la diversidad cultural y las particularidades de cada territorio.
"Los niños son el motivo para articular esfuerzos interinstitucionales, porque este programa significa que no solo vamos a asegurar la alimentación, significa que estamos asegurando su futuro", afirmó el Ministro Calderón, subrayando la importancia del programa.
Por su parte, Matteo Perrone destacó la motivación que representa ver la felicidad de los niños, lo cual impulsa al PMA a expandir su alcance a más comunidades en Ecuador.
Actualmente, el modelo de alimentación escolar del Ministerio de Educación beneficia a aproximadamente 2.9 millones de estudiantes de 12.303 instituciones educativas a nivel nacional, incluyendo escuelas fiscales, municipales y fiscomisionales.
La implementación de este nuevo modelo promete no solo mejorar la calidad de la alimentación entre los estudiantes ecuatorianos sino también fortalecer los lazos comunitarios, culturales y económicos en las provincias involucradas.