Atropellados, encadenados, olvidados... Los héroes que rescatan perros y gatos en Portoviejo
La Fundación Rescate Portoviejo nació después del Terremoto de Manabí de 2016.
Rocky es un perro que fue encontrado en una loma de la zona rural de Manabí. Los vecinos alertaron a la Fundación Rescate Portoviejo sobre este caso e inmediatamente los voluntarios acudieron con la Policía al rescate del animal.
El perro de raza pitbull estaba encadenado a un árbol en medio del desierto, sin comida, ni agua. Además, tenía un tumor en el cuello, producto de las condiciones a las que fue sometido. Los rescatistas llevaron a Rocky a un veterinario para extraer el quiste y mejorar su salud.
Una de las voluntarias de la fundación lo acogió hasta que se recupere completamente, pero el cariño que Rocky proporcionaba a su cuidadora hizo que decidiera adoptarlo. Ahora es feliz, lejos de aquel árbol en el que pasó encadenado.
Una situación igual de preocupante tuvo que pasar Manolito, un cachorro que necesita una reconstrucción de cadera, pues arrastra sus dos patas traseras. No se sabe qué le ocurrió, pero los rescatistas piensan que fue atropellado.
La Fundación Rescate Portoviejo necesita financiar la operación, que costaría alrededor de 800 dólares. Sin embargo, no cuentan con los recursos suficientes para la intervención y los gastos que implica el cuidado de Manolito y muchas mascotas más que rescatan a diario.
DESPUÉS DEL TERREMOTO
En el 2016, cuando Manabí vivía momentos críticos tras el terremoto de magnitud de 7,8, un grupo de voluntarios se unió para ayudar a los perros y gatos que se quedaron sin hogar o que habían sufrido heridas.
Así nació Fundación Rescate Portoviejo, un grupo de 20 voluntarios que todos los días acuden a los lugares más recónditos de la provincia para rescatar mascotas en estado de vulnerabilidad.
No tienen un refugio específico, sino que trabajan con hogares temporales que los cuidan hasta que estén listos para la adopción.
“Cuidamos a más de 120 perros y más de 250 gatos, distribuidos en distintas casas de rescatistas, que son en realidad los que les cuidan. Nosotros somos su apoyo en cuanto a alimentos, medicinas y veterinarios”, señaló Fressia Villacreses, presidenta de la fundación.
Las ganas por ayudar a las mascotas son inmensas, pero los recursos limitados. Actualmente, la fundación acumula una deuda de cuatro mil dólares, entre veterinarios, comida y otros gastos, que les dificulta seguir acogiendo a más animales.
Rescate Portoviejo subsiste con el dinero de los miembros de la fundación y donaciones, además, hacen rifas o concursos, pero no son suficientes para solventar los costos de las cirugías.
Otra de las dificultades que atraviesan es la falta de lugares de acogida, al no tener un refugio, las casas de los voluntarios están saturadas.
“De parte de las autoridades no hay apoyo, tampoco hemos insistido porque ese tiempo lo destinamos a seguir ayudando animales”, indicó Villacreses.
Agrega que los accidentes de tránsito son el mayor problema que enfrentan las mascotas en Portoviejo. Durante el confinamiento hubo pocos atropellos, “casi ninguno”.
“Una vez que se abrió todo, empezaron a existir los atropellados, porque la gente maneja irresponsablemente y no respeta la vida. A la semana atendemos por lo menos a unos 30 animales entre atropellados, abandonados y otras circunstancias”.
LOS ANIMALES NO SON OBJETOS
A través de las redes sociales, la fundación muestra la dura realidad que viven muchos perros y gatos callejeros, con esto quieren concientizar a las personas a no abandonarlos.
“La mascota no es para cuidar ni tu casa, ni tu negocio, es para darte amor, hacerte compañía y estar contigo cuando más lo necesites. No abandonen, no vean a los animales como un objeto, son parte de la familia”, mencionó Cecilia Vivanco, representante de la organización.
ADOPCIONES
Las personas que quieran adoptar a un perro o gato pueden contactarse a través de las redes sociales. Después son sometidas a un riguroso proceso que consiste en una entrevista y visita al hogar donde vivirá la mascota, la casa debe tener un cerramiento seguro, sobre todo en el caso de los perros.
“La persona que adopta debe llenar una ficha, donde se comprometen a cuidar a las mascotas y mensualmente deben enviar fotos y videos para verificar que el animal esté en buenas condiciones”, explicó Lady Cevallos, tesorera de la fundación.
Si no quiere adoptar, puede ser padrino y aportar con la esterilización, donación de alimentos o ayudar en los pagos de servicios veterinarios. Cualquier contribución es bienvenida.
Las personas que quieran aportar con Fundación Rescate Portoviejo pueden hacerlo a través de los siguientes medios:
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