Representes del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur) y de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) dieron su apoyo al presidente Guillermo Lasso, con miras al plan de integración que pretende sacar adelante con los migrantes venezolanos.
El encuentro, en el que participó también el ministro de Exteriores, Mauricio Montalvo, tuvo el objeto de fortalecer los lazos entre el Gobierno ecuatoriano y estas organizaciones internacionales, con el fin de establecer acciones conjuntas.
"Se revisaron los principales avances sobre los procesos de identidad y regularización de la población migrante en Ecuador, que ya han iniciado en el país gracias a la coordinación entre el Gobierno y estas entidades", dice un comunicado de la Cancillería ecuatoriana que cita al viceministro de Movilidad Humana, Luis Vayas.
Según las cifras oficiales, en Ecuador residen 450.000 migrantes venezolanos, una cifra que algunas organizaciones internacionales amplían hasta 600.000, y que la mayoría de los cuales necesita aún regularizar su situación.
En julio de 2019 el anterior Gobierno ecuatoriano lanzó un plan de regularización en coordinación con otros países afectados en el llamado "Proceso de Quito", pero no tuvo demasiado éxito porque empezó la pandemia y muchos de los venezolanos no tenían siquiera los 50 dólares que se requerían para la llamada "Visa humanitaria".
En una entrevista este jueves con Efe, Lasso aseguró que su plan para estos migrantes incluye no sólo la "regularización", sino también una política de inclusión e integración.
Consiste en "una regularización con integración porque han venido a Ecuador no solamente a hacer papeles sino a incorporarse a la sociedad ecuatoriana. El fenómeno de la migración es muy doloroso y no podemos aislar a los venezolanos", afirmó el mandatario.
El representante especial conjunto de Acnur y OIM para migrantes y refugiados de Venezuela, Eduardo Stein, le reiteró hoy al nuevo presidente "el apoyo" de ambas organizaciones "a los esfuerzos" por regularizar a todos, porque "no solo se trata de un proceso de regularización y documentación, sino que va acompañado de procesos de integración socioeconómica de esta población".
"Es refrescante para la región el avance que Ecuador está haciendo", manifestó Stein, según el comunicado de Cancillería.