Cinco personas (entre ellas dos menores de edad) relacionadas a un caso de sicariato en una clínica privada en Guayaquil, fueron capturadas la madrugada de este primero de julio. Teleamazonas difundió un video en donde se aprecia a los agentes policiales allanar una vivienda.
“¡Abran la puerta, abran la puerta!” gritaban los policías.
También se escucha como patean la puerta para entrar. Según Fiscalía, el operativo contempló otros 12 allanamientos más en el Guasmo, Flor de Bastión y la Penitenciaría del Litoral.
Estas personas estarían presuntamente vinculadas al asesinato de una mujer de nacionalidad peruana en una clínica al norte de Guayaquil, ocurrido el pasado 5 de mayo. Entonces se descubrió que los sicarios realmente iban a matar a otra persona, pero que, como ese paciente fue cambiado de sala, los criminales se confundieron y acabaron con la vida de la ciudadana peruana, quien recientemente había sido trasladada a misma habitación.
Según la Policía, en el operativo se incautaron 3 armas de fuego y 179 municiones.
Previamente ya se habían decomisado dos vehículos que fueron abandonados en el suburbio de Guayaquil: un taxi y un automóvil Kia blanco, donde se movilizaron los aparentes criminales para cometer el delito.
Se llegó a conocer que la víctima de este crimen se llamaba Carla Rocchetti y tenía 40 años. Asimismo, el hombre que antes había estado en la habitación (y el verdadero objetivo de los criminales, Jonathan Quintero, alias Popeye) previamente ya había sido víctima de un intento de asesinato en abril, ocurrido Posorja.
La Fiscal del caso, Margarita Neira, cree que el motivo del intento de asesinato al hombre habría sido una lucha interna de una banda dedicada al tráfico de droga.
"Aún se mantiene esta hipótesis, este señor estuvo asilado hasta dos días antes del crimen de la peruana, luego fue dado de alta. Todo se debería a una lucha por territorio para el expendio de la droga, especialmente en Posorja", señaló la funcionaria a Extra.