El Operador Nacional de Electricidad de Ecuador (Cenace) anunció este sábado que logró restablecer el normal suministro eléctrico, tras el masivo apagón ocurrido en la mañana por un fallo en la hidroeléctrica de Paute, una de las más importantes fuentes de energía del país.
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“Informamos a la ciudadanía que, al momento, se ha restablecido el 100 % del servicio eléctrico en las provincias que fueron afectadas esta mañana”, señaló el Cenace en un corto mensaje en redes sociales.
Varias provincias sufrieron la mañana de este sábado un apagón masivo debido a “una falla en la barra de la subestación Molino, la cual está conectada a la generación de Paute”, la segunda mayor hidroeléctrica ecuatoriana, había informado en principio el propio Cenace.
El desperfecto ha sido solucionado de forma paulatina luego de unas cuatro horas, lapso en que gran parte del país se quedó sin el suministro de energía.
Paute, con unos 1.000 megavatios de potencia instalada, está emplazada en el sur andino del país, en un complejo que incluye otras tres centrales de menor capacidad que aportan en conjunto hasta unos 1.700 megavatios.
El apagón se acentuó en provincias de la Sierra como Imbabura, Pichincha, Chimborazo, Carchi, Loja, Cotopaxi, Tungurahua y Azuay. Lo mismo ocurrió en las costeras de Guayas, El Oro, Manabí, Los Ríos y Esmeraldas, y la amazónica de Sucumbíos.
En Quito, el apagón de este sábado provocó un caos en el tráfico y en las actividades productivas que se vieron suspendidas de forma abrupta.
Semáforos apagados, colisiones, congestión de vehículos y peleas entre los conductores fueron frecuentes en la ciudad. Así mismo, el Metro de Quito dejó de operar y hasta el cierre de esta nota sigue en pausa, pese a que todo volvió a la normalidad.
La misma tónica se repitió en Guayaquil, donde se suspendió temporalmente el servicio de la aerovía.
Por su parte, la Cámara de Comercio de esa ciudad portuaria advirtió que cada hora sin suministro eléctrico le cuesta al país aproximadamente 12 millones de dólares.
Durante los apagones registrados a principios de año, las pérdidas superaron los 1.440 millones de dólares. “Si esta situación se repite, representará un nuevo y significativo impacto para la ya debilitada economía nacional”, apuntó la institución.
Además, la Cámara de Comercio de Guayaquil pidió a las autoridades que “transparenten las causas de estos cortes y se establezcan protocolos de comunicación claros que permitan a los actores económicos anticipar y mitigar estas consecuencias”.