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Internacional

Muere Samuel Little, el mayor asesino serial de la historia de EE.UU

jueves, 31 diciembre 2020 - 11:59
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Samuel Little, el asesino serial más prolífico de Estados Unidos según el FBI, murió en California a los 80 años el miércoles, informaron funcionarios de la prisión.
 
El asesino, que cumplía cadena perpetua, murió en un hospital californiano, informó hoy en un comunicado el Departamento de Correcciones y Rehabilitación de este estado.
Little confesó 93 asesinatos, la mayoría de mujeres, cometidos entre 1970 y 2005, pero su ola crímenes pasó desapercibida durante décadas.
 
Las víctimas del ex boxeador eran, en su mayoría drogadictos y prostitutas, y en numerosos casos las mujeres nunca fueron identificadas o sus muertes no fueron investigadas.
 
Después de que Little comenzara a nombrar a las víctimas tras las rejas, el año pasado el FBI confirmó la participación de Little en al menos 50 de las muertes, y describió todas sus demás afirmaciones como “creíbles”.
 
El criminal murió en el hospital la madrugada del miércoles, y los médicos forenses de Los Ángeles aún deben determinar la causa del deceso, dijo el Departamento de Correccionales de California en un comunicado.
 
Little cumplía tres condenas consecutivas de cadena perpetua sin libertad condicional, después de ser encarcelado en 2014.
 
Lla Policía quiso compartir su ADN y detalles de su modus operandi con el FBI para que realizara una investigación más profunda.
 
Lo que el FBI halló fue "un alarmante patrón y nexos convincentes con muchos otros asesinatos", en su mayoría "mujeres vulnerables y marginadas" dedicadas a la prostitución y adictas a las drogas.
 
Según Infobae también era conocido como Samuel McDowell, Little medía 1,9 m de altura y normalmente noqueaba a sus víctimas con poderosos puñetazos antes de estrangularlas, sin dejar signos evidentes de homicidio, como puñaladas o heridas de bala.
 
Ese factor, combinado con los antecedentes de las víctimas, llevó a que muchas de las muertes fueran atribuidas a sobredosis de drogas o a accidentes, así como a causas naturales.
 
Los casos que la oficina federal pudo confirmar le concedieron un infame récord: se convirtió en el mayor asesino serial de la historia de los Estados Unidos. Superó, por amplio margen, a otros más famosos hasta el momento, como Joseph James DeAngelo -conocido como The Golden State Killer- o al nunca identificado Zodiac. La suma de las muertes perpetradas por estos dos famosos monstruos norteamericanos alcanzan las 49 víctimas, una menos que Little.
 
Con su macabra cosecha también superó a otros asesinos seriales: Gary Ridgway, apodado el Green River Killer, quien fue declarado culpable de 49 asesinatos y confeso de otros 20. Ted Bundy y John Wayne Gacy, quienes asesinaron a más de 30 personas cada uno, pero Bundy era sospechoso de más.
 
La sangrienta manufactura de Little comenzó en los años 70, como el de sus “competidores”. Pero permaneció -desde septiembre de 2012- en prisión por tres crímenes ejecutados entre 1987 y 1989 a dos mujeres y otra más en 1994, cuya autoría pudo probarse.
 
 
Nacido el 7 de junio de 1940 en Reynolds, de muy pequeño ya mostró una personalidad conflictiva, pese a haber trabajado en diversos puestos: desde peón en un cementerio de Florida hasta conductor de ambulancia... la muerte lo perseguía. Hasta que él la tomó para sí.
 
Cuando cumplió 21 años fue detenido por primera vez: por robo. Tres años purgó en prisión. Finalmente fue liberado en 1964. Pero un año después ya portaba otro récord: había estado arrestado una veintena de veces en once estados diferentes por temas menores.
 
En 1982 fue arrestado por el primer cargo por un asesinato, cuya condena esquivó por falta de pruebas. En 1984, lo mismo. Parecía que la suerte estaba de su lado... aunque no quiso tentarla más. En octubre de ese mismo año decidió mudarse a California, donde su raid sangriento continuaría en ascenso
 
Pero los problemas continuaron. Todas sus presas eran mujeres a las cuales golpeaba y estrangulaba salvajemente. Hasta matarlas. “Durante muchos años, Samuel Little creyó que no lo atraparían porque pensó que nadie estaba contando a sus víctimas”, dijo Christie Palazzolo, analista de delitos del FBI. “Aunque ya está en prisión, el FBI cree que es importante buscar justicia para cada víctima, cerrar todos los casos posibles”.
 
El FBI de Texas, acompañados por los Rangers de ese estado y los federales decidieron interrogar en la cárcel a Little, que accedió a cooperar a cambio de un traslado penitenciario.
 
"Repasó ciudades y estados y les entregó a los 'rangers' el número de personas que mató en cada lugar. Jackson, Misisipi, una; Cincinnati, Ohio, una; Phoenix, Arizona, tres; Las Vegas, Nevada, una", explicó el FBI en 2018.
 
La oficina de investigaciones federales grabó entrevistas en las que Little explicó cómo fueron cada uno de sus asesinatos. Sin embargo, muchas de las historias que relataba no concordaban con los registros que dan cuenta de la manera en que murieron las mujeres. Es por eso que solicitaron la ayuda de posibles testigos para armar el complejo rompecabezas.
 
Hasta el momento, el FBI solo pudo vincular 50 de los crímenes confesados con lo ocurrido en realidad. El plan es poder cerrar cada una de las historias.
 
A las mujeres les daba un puñetazo que las dejaba inconscientes y las estrangulaba mientras se masturbaba. Luego ocultaba el cadáver y huía del pueblo.
 
Durante años, Little negó los cargos que se le imputaron. Hasta que finalmente decidió contar la verdad. A partir de sus dichos -y las consecuentes comprobaciones- diferentes estados han puesto a sus fiscales a trabajar y a levantar cargos contra el asesino serial.
 
Informes de medios estadounidenses dijeron recientemente que padecía una enfermedad cardíaca y diabetes.
 
 
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