La mañana del pasado viernes, 2 de julio, se registró una explosión y un fuerte incendio en un gasoducto submarino de Petróleos Mexicanos (Pemex), frente a las costas del estado de Campeche.
El incidente fue controlado cinco horas después y no se anotaron heridos, ni evacuados.
Aproximadamente a las 5:15 de la mañana se localizó una fuga de gas en un ducto submarino de 12 pulgadas, ocasionando un impresionante ‘ojo de fuego’.
“El incidente fue atendido de inmediato al activarse los protocolos de seguridad y con el acompañamiento de embarcaciones cercanas de contraincendio como Isla Santa Cruz, Bahía de Campeche y Bourbon Alienor“, informó la compañía en un comunicado.
Como parte del protocolo de seguridad, Pemex cerró las válvulas de interconexión en el ducto, extinguiéndose el fuego y la emanación de gas.
Concluidos los trabajos, alrededor de las 10:45 se restablecieron las condiciones normales de operación.
Al momento se desconocen las causas del incidente, pero la compañía anunció que realizará una investigación para determinar los factores que incidieron en la fuga de gas en el ducto, pertenece al complejo Ku Maloob Zap.
Pemex es una de las empresas energéticas más endeudadas del mundo, su falta de inversión en tecnología ha provocado la disminución de la producción de petróleo en México, desde hace varios años.
Mientras, el exlíder de la empresa, Emilio Lozoya, está siendo juzgado por corrupción.
Por ello, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, planea rescatar a la empresa para impulsar la autosuficiencia energética del país.