Karen Granados, de 30 años, era una persona saludable y llena de vida, pero de manera repentina empezó a enfermarse. “Le dolía mucho su cabeza y decía que tenía mucho escalofrío”, relató la madre de la mujer al programa Primer Impacto, de la cadena Univisión.
La mujer fue llevada con varios doctores, sin que ninguno le encontrara la verdadera causa del malestar. “Decían que estaba bien”, aseguró el esposo de la paciente.
Tiempo después, la salud de Karen empeoró hasta quedar en la cama, sin poder levantarse. Aquel día, fue internada de emergencia en un hospital. Exámenes más especializados confirmaron que padecía rickettsiosis.
Según la página del Hospital Clínic de Barcelona, la rickettsiosis es una enfermedad que se transmite a los humanos por la picadura de la garrapata del perro.
Generalmente, es un padecimiento que cursa de forma benigna y no deja secuelas, pero en un pequeño porcentaje de personas “puede producir complicaciones en forma de vasculitis (inflamación de los vasos sanguíneos) y fallo de múltiples órganos”.
Los efectos de la picadura pueden empeorar de acuerdo a la edad del paciente, tener otras enfermedades y el retraso en el diagnóstico.
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En el caso de Karen, la joven quedó en estado vegetativo. Permanece postrada e inmovilizada en la cama de la única habitación que tiene en su casa.
“Hace pocos movimientos en sus manos, sus ojos si los mueve”, contó el esposo a Primer Impacto.
El programa de televisión reveló que no se sabe a ciencia cierta dónde le picó la garrapata. Sin embargo, al fumigar encontraron ejemplares de los insectos en su vivienda, donde es evidente la pobreza y el deterioro.
En esas condiciones la salud de Karen se agravaría, por ello sus vecinos ayudaron a reconstruir el cuarto de la mujer, le brindan comida y lavan su ropa, etc.
Los moradores de un pequeño poblado de Mexicali, capital del estado de Baja California, al norte de México, indicaron que faltan más recursos para que la paciente pueda recuperarse.
Las personas que quieran ayudar pueden ingresar a primerimpacto.com.
Mientras tanto, el futuro de Karen es incierto. Falta un diagnóstico médico que indique si su estado será permanente. La familia espera un milagro.