Cae también el hermano del diputado Germán Kiczka: Avanza la red de escándalo de abuso sexual infantil en Argentina
Los Kiczka son investigados en relación con una red internacional de producción y distribución de material de abuso sexual infantil.
Tras la captura del diputado Germán Kiczka este miércoles en la provincia de Corrientes, su hermano, Sebastián Kiczka, fue arrestado al día siguiente en Misiones. Ambos están acusados de posesión y distribución de material de abuso sexual infantil, lo que ha desatado un escándalo en Argentina.
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Sebastián Kiczka fue capturado en la localidad misionera de San Juan de la Sierra, según confirmaron fuentes judiciales y policiales citadas por medios locales.
Sobre Kiczka pesaba una orden de captura emitida por el juez penal Miguel Faría, quien también había solicitado la captura internacional de su hermano Germán Kiczka a través de Interpol. Esta medida se tomó luego de que surgieran sospechas de que el diputado podría haber huido hacia Brasil o Paraguay, tras solicitar una habitación en un hotel de Puerto Iguazú, cerca de la Triple Frontera.
El arresto de Germán Kiczka, quien había estado prófugo desde el 22 de agosto, se produjo un día antes en la provincia de Corrientes. La Cámara de Diputados de Misiones no tardó en actuar: la semana pasada, los legisladores aprobaron por unanimidad el desafuero de Kiczka, permitiendo así que las autoridades procedieran con su detención.
Los Kiczka son investigados en relación con una red internacional de producción y distribución de material de abuso sexual infantil, descubierta durante la operación policial "Guardianes digitales por la niñez".
Esta operación, realizada en marzo por la Policía Federal Argentina, llevó a registros de domicilios en varias provincias, incluyendo Buenos Aires, Misiones y Tucumán. En el caso de los hermanos Kiczka, la policía encontró una gran cantidad de material de pornografía infantil y zoofilia en distintos dispositivos electrónicos en su posesión.
La investigación tomó un giro aún más grave al revelarse que la denuncia inicial fue realizada por la ONG estadounidense 'The International Centre for Missing and Exploited Children'. La conexión de los acusados con una red internacional ha generado una ola de indignación y ha expuesto las posibles implicaciones políticas del caso, dado que Germán Kiczka pertenecía al partido de ultraderecha La Libertad Avanza.
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