La visa del tenista Novak Djokovic fue cancelada de nuevo por el gobierno australiano, el cuál comunicó que el serbio será detenido el sábado para que se presente en una sala judicial, con el objetivo de resolver si se procederá a su deportación o no.
Tras varios días estudiando el caso, el ministro de Inmigración, Alex Hawke, decidió hoy volver a cancelar el visado de Djokovic con la intención de expulsarlo del país, lo que también podría implicar la prohibición de volver durante tres años a Australia.
"Hoy he ejercido mi poder bajo la sección 133C (3) de la Ley de Inmigración para cancelar el visado del Sr. Novak Djokovic basado en razones sanitarias y del mantenimiento del orden por ser de interés público", señaló el ministro en un escueto comunicado al remarcar que sopesó "cuidadosamente" la información proporcionada por las partes.
Tras la anulación, un juez australiano ordenó en una vista de emergencia que Djokovic no sea deportado "de manera inmediata" hasta que la justicia revise el domingo la decisión tomada por el ministro de Inmigración, que será impugnada por los abogados del tenista.
El juez Anthony Kelly también determinó que Djokovic permanezca en libertad hasta las 8 de la mañana del sábado (23.00 GMT del viernes) cuando acuda a una cita con los funcionarios de inmigración en la ciudad de Melbourne, en donde será detenido.Sin embargo, dos agentes de aduanas trasladarán después a Djokovic hasta el lugar donde pueda reunirse con sus abogados para preparar el caso.
La vista se celebrará en el Tribunal Federal, una instancia superior, y se espera que comience y acabe el domingo, un día antes del inicio del Abierto de Australia, que se celebra entre el 17 y el 30 de enero en la ciudad de Melbourne.
El fin de semana se determinará si Djokovic, quién viajó el 5 de enero a Melbourne desde España con una exención médica para no estar vacunado al haber estado contagiado de la covid-19 recientemente, podrá permanecer en el país de Oceanía para disputar el Australian Open, torneo que busca ganar para superar en número de Grand Slams conseguidos a sus rivales, el español Rafael Nadal, y el suizo Roger Federer.