Un joven de 13 años tiroteó hoy mortalmente a nueve personas, entre ellas ocho menores, en un colegio del centro de Belgrado e hirió a otras siete, en una tragedia que el autor, que fue detenido, planeó durante al menos un mes.
Además, otras siete personas, una profesora y seis alumnos, resultaron heridos en el tiroteo. El estado de salud de dos de los heridos y de la docente es muy grave, según señala la emisora N1.
El presunto agresor, un alumno de esa misma escuela, usó para cometer la masacre una pistola propiedad de su padre, quien fue también arrestado, según informaron las autoridades.
El director de la Policía de Belgrado, Veselin Milic, señaló en rueda de prensa que el agresor había elaborado una lista de las personas a las que pretendía asesinar, y que estuvo planeando el ataque durante un mes.
"Tenía una lista de niños que planeaba liquidar", dijo Milic, quien indicó que una tragedia de este tipo jamás había ocurrido en Serbia.
Milic informó de que el joven había preparado un plano de la entrada a la escuela y de las aulas más cercanas en las que hoy acabó con la vida de un guardia de seguridad y ocho escolares, siete niñas y un niño.
Aunque el director de la Policía señaló que no se han establecido aún los motivos del ataque, los medios serbios señalan que el agresor, descrito como un alumno modelo, había sacado malas notas en la asignatura de Historia.
De hecho, Milic, indicó que eligió el día hoy para el ataque porque la primera clase de la mañana, la de Historia, tenía lugar en un aula cerca de la entrada del centro escolar, donde se cobró la mayoría de las víctimas.
En la bolsa que portaba se encontraron cuatro cócteles Molotov.
El ataque comenzó a las 08.40 de la mañana (06.40 GMT). Al entrar en la escuela, el presunto agresor disparó primero en el vestíbulo al guardia, que murió en el acto, y luego mató a dos niños, antes de dirigirse al aula donde disparó a la profesora de Historia y a los alumnos que estaban en la sala.
"Empezó a disparar al azar, primero le dio a la profesora de Historia y luego siguió disparando. Mató a dos de nuestros amigos, me tumbé encima de ellos para que pensara que estaba muerta", ha relatado al portal Nova una compañera del supuesto autor del tiroteo.
El presunto agresor llamó luego a la policía desde el patio, donde fue arrestado.
El chico practicaba con su padre en polígonos de tiro y así había aprendido a disparar, señaló el ministro del Interior, Bratislav Gasic.
"El padre afirma que tenía más de una pistola y que las mantenía bajo llave", explicó el ministro, quien añadió que parece que el adolescente se las arregló para hacerse con dos armas y con tres cargadores con quince balas cada uno, señala la emisora N1.
La fiscalía también indicó que ha pedido un análisis toxicológico de la sangre del agresor.
No están aún claros los cargos contra el menor, que aún no ha cumplido los 14 años, la edad mínima de responsabilidad penal en Serbia.
El Sindicato de Trabajadores de Educación de Serbia se solidarizó con las familias de las víctimas, denunció el creciente clima de violencia en las aulas y pidió reforzar los controles de armas.
El Gobierno ha declarado tres días de luto a partir del viernes por esta masacre.
Aunque los tiroteos con un gran número de víctimas no son frecuentes, Serbia es uno de los países del mundo en el que, proporcionalmente a la población, hay más armas en manos de particulares.