Elon Musk sembró dudas sobre su deseo de comprar Twitter al anunciar el viernes que suspendía provisionalmente su adquisición a la espera de detalles sobre la proporción de cuentas falsas en la plataforma.
Pero luego, el hombre más rico del mundo aseguró que "sigue comprometido con la adquisición" de Twitter, cuya compra anunció por cerca de 44.000 millones de dólares, dos horas después de haber dicho que dejaba el acuerdo pendiente.
"El acuerdo de Twitter queda suspendido temporalmente a la espera de detalles que respalden el cálculo de que las cuentas falsas y de spam representan menos del 5 % de los usuarios”, escribió Musk en un mensaje publicado en la misma red social de la que pretende ser dueño.
El tuit, publicado a las 5.44 de la mañana hora de Nueva York, generó más de 10.000 comentarios y fue rebotado más de 16.000 ocasiones.
Nada más conocerse la noticia, las acciones de Twitter se desplomaron cerca del 20 %, hasta rondar los 36,5 dólares, antes de la apertura de Wall Street.
Pero poco más de dos horas después, a las -7.50 hora local- el empresario escribió otro breve tuit en el que se limitaba a asegurar: "Todavía comprometido con la adquisición".
Tras el nuevo mensaje, las acciones de la plataforma en las operaciones electrónicas anteriores a la apertura de Wall Street recuperaban parte del terreno perdido, pero a las 8.20 hora local (12.20 GMT) seguían cayendo más de un 11 %.
Musk ofreció 54,2 dólares por cada acción de la popular red social, un 20 % más que el precio de cierre del jueves y más de un 40 % por encima del valor al que se está cambiando en las negociaciones previas a la apertura del mercado neoyorquino.
En las últimas semanas, varios fondos de inversión y otros millonarios se han comprometido a aportar 7.000 millones de dólares a los 21.000 millones que Elon Musk se comprometió a pagar de su propio bolsillo para adquirir Twitter.
El magnate había anunciado que su intención era sacar de Bolsa a la compañía una vez hubiese concluido la operación de compra, que su intención era ocupar el cargo de consejero delegado (CEO), según adelantó en su día el canal CNBC, al menos durante “unos pocos meses”, y que pasados tres años la vendería de nuevo.
También dijo que levantaría el veto en la red social al expresidente estadounidense Donald Trump, cuya cuenta permanece cerrada desde el asalto al Capitolio por parte de miles de sus seguidores en 2021.
Twitter ganó 513 millones de dólares (más de 490 millones de euros) en el primer trimestre del año, lo que supone siete veces más que un año antes (un 655 % más), impulsada por la venta de su negocio de publicidad en el celular MoPub.