Patricia González: Toda una vida de creación
Rosa de Plata - Mujeres del año
La cantante guayaquileña Patricia González se inició en la música a temprana edad, a los 4 años ya tocaba el piano y a los 12 le regalaron su primera guitarra, instrumento que ha sido su compañero fiel en estos 50 años de trayectoria musical.
La artista afirma haber nacido en una familia muy musical, de madre y tíos cantantes. “Crecí en una casa donde había más pianos que camas... Así que podríamos decir que lo que me llevó a la música, fue cosa del destino”, relata.
Su primer álbum lo grabó a finales de 1968 en Bogotá, e incluía los boleros La torre y En un rincón del alma del compositor Alberto Cortez. Inició profesionalmente su carrera en 1970, cuando Santiago Bo, representante artístico argentino, la invitó a actuar en el Teatro 9 de Octubre de Guayaquil, alternando con el cantante cubano, Rolando La serie. Desde ese entonces ha interpretado boleros, valses peruanos, pasillos ecuatorianos, rancheras y algún que otro tango.
A lo largo de su carrera ha grabado más de 40 discos y ha estado en escenarios de Ecuador, Colombia, Perú, Venezuela, Panamá, Costa Rica, Brasil, México, Estados Unidos, Francia, Suiza, Portugal, España. Su música hoy en día y gracias a las nuevas plataformas digitales se encuentra en más de 70 países del mundo.
Cuando le preguntamos cuál de sus discos es el más cercano a su corazón, ella no puede quedarse con uno y nos menciona dos. Aquel llamado “Mis Mejores 20 Boleros”, grabado en Colombia bajo la dirección de Josefina Severino; y el de duetos “Mi Vida es un Bolero”, que grabó en Miami bajo la dirección de Albita Rodríguez, el cuál cantó con grandes artistas como Armando Manzanero, Andrés Cepeda, Amaury Gutiérrez, Jorge Villamizar, Alejandro Jaén, Margarita Rosa De Francisco, entre otros.
Patricia se confiesa gran admiradora de Chabuca Granda, Armando Manzanero, Nelson Ned, Alberto Cortez, Joan Manuel Serrat y muchos otros artistas que han escrito las canciones que tanto ha amado, con muchos de ellos ha compartido escenario. Ella asegura: “Esta profesión me ha dado el privilegio de conocer a estas personas y, además, ser amiga de ellos”.
A lo largo de su trayectoria ha recibido varios reconocimientos, entre los más relevantes están, el haber sido galardonada por el Gobierno de la República del Ecuador, la Prefectura del Guayas y el Municipio del Guayas; en Colombia recibió la Condecoración Secretaría Ejecutiva del Convenio Andrés Bello en la categoría de Honor al Mérito, galardón con el cual afirma rebasó las fronteras de su país natal y se convirtió en embajadora cultural de los pueblos de América. “Ecuador es mi país natal y el sitio donde he vivido gran parte de mi vida. Y Colombia es sin dudarlo, mi segundo hogar, pues fue el país donde grabé mi primer disco, donde triunfé cuando empezaba a cantar y donde me bautizaron como ''La voz del amor’".
Sobre el reconocimiento a la trayectoria de vida que hoy recibe de parte de revista Hogar, Patricia comenta: “Siempre es grato para cualquier artista, ser reconocidos por nuestro trabajo. Y este premio tiene un especial significado pues destaca el aporte que los artistas hacemos a la sociedad. El arte, en cualquiera de sus manifestaciones, permite al ser humano crear y expresar, y esta capacidad es fundamental para el desarrollo cultural de los países. Me siento honrada de que la Revista Hogar me haya elegido para elogiar mi labor en la sociedad, pues de esta forma se elogia el trabajo de muchos otros artistas que dedican su vida a la creación”.
A sus 78 años, Patricia asegura no considerarse un referente, pero se siente honrada al saber que su ejemplo sirve de inspiración a otros artistas, a ellos les aconseja, “que dediquen su vida a lo que aman y que nunca pierdan el respeto a su público, pues es gracias a ellos que los artistas, a veces estamos arriba y otras veces, estamos abajo”.