IA en el top 10 de riesgos para la salud en 2024
La ONG ECRI afirma que el uso de inteligencia artificial para obtener diagnósticos médicos representa peligros a evaluar durante este año.
La inteligencia artificial, conocida por sus siglas en español IA, cada vez gana más terreno en lo cotidiano. Desde reinvenciones en el uso de electrodomésticos, apps que replican la imagen y voz de un artista de maneras casi imperceptibles, hasta la elaboración automática de diagnósticos médicos.
Sin embargo, ha sido catalogada como el quinto de los 10 principales peligros de la tecnología sanitaria por la ECRI, organización que evalúa la seguridad y calidad de la atención al paciente a nivel mundial. Debido a que las soluciones que provee no son totalmente infalibles, y podrían revelar sesgos raciales existentes.
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En una reciente entrevista con el portal web Chief Healthcare Executive®, presidente y director ejecutivo de ECRI, Marcus Schabacker dijo que la inteligencia artificial “tiene un enorme potencial para beneficiar la atención médica y hacerla más confiable y efectiva, pero en este momento no contamos con los mecanismos adecuados para garantizar que sea segura".
Por lo reciente de su aplicación en lo sanitario, es complejo verificar que su funcionalidad haya sido probada previamente en una cantidad representativa de poblaciones diversas, “o si se centraron principalmente en hombres blancos”, comenta. Es decir, los patrones referenciales que utilizan estos algoritmos para garantizar efectividad podrían estar inclinados hacia determinados grupos poblacionales, y "una vez que tienes a alguien que no encaja en ese subconjunto, obtienes un resultado muy equivocado", señala Shabacker.
Además, directivos de la organización mencionada manifiestan su preocupación ante el escaso seguimiento y evaluaciones por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés). Ya que su objetivo es respaldar tareas médicas, y temen que “se conviertan en herramientas de toma de decisiones...y ciertamente no están diseñados ni regulados para ello", dijo Marcus.
Mientras tanto, se recomienda aclarar que el uso de estas nuevas tecnologías mantienen el objetivo de dar soporte a la salud, y se sugiere recurrir siempre a más de una opinión médica que garantice experiencia y sea de confianza.