Todo sobre el corazón de una mujer
El diagnóstico de presión arterial alta y diabetes tipo 2 le llegó a Mari cuando aún no cumplía los 40 años, su padre ya las había padecido y aunque falleció por complicaciones con la diabetes el tema del corazón siempre estuvo latente, por esa razón ella tiene que estar alerta, y es que tener obesidad también juega en su contra. Su cardiólogo la monitorea cada 6 meses, porque aunque no presenta una patología cardiovascular cumple algunos de los parámetros de riesgo.
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo, representando el 31% de todas las muertes globales, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), por eso se torna fundamental entender los síntomas y los factores de riesgo. Y más en el caso de las mujeres, pues las estadísticas indican que suelen buscar ayuda médica más tarde que los hombres y al superar los 55 años el riesgo de sufrir un ataque cardíaco se eleva.
Principales enfermedades cardiovasculares
Pero ¿a qué enfermedades cardiovasculares son a las que más expuesta está una mujer? La doctora Patricia Delgado, médica cardióloga Fundadora del Instituto Ecuatoriano del Corazón nos dice que son:
MINOCA: infarto agudo de miocardio sin lesiones coronarias obstructivas (por sus siglas en inglés)
ANOCA: angina con arterias coronarias sin lesiones obstructivas
INOCA: isquemia con arterias coronarias no obstructivas
Además, la especialista enfatiza que las enfermedades valvulares, especialmente la estenosis aórtica, tienen un comportamiento diferente en la mujer. En el último congreso que se realizó en Londres de la Sociedad Europea de Cardiología se habló inclusive de un nuevo tratamiento, se trata de realizar un TAVI que consiste en implantar la válvula aórtica a través de catéteres en lugar de abrir el pecho y colocar una prótesis biológica o mecánica, ya se han realizado estudios que determinan que las mujeres responden mucho mejor a este procedimiento.
Ataques cardíacos en mujeres
El infarto agudo de miocardio, afecta tanto a hombres como a mujeres, pero se manifiesta de forma distinta. La doctora Delgado señala que mientras los hombres suelen presentar angina de pecho (dolor), en las mujeres el signo más frecuente es la disnea (dificultad respiratoria). “La mujer llega diciendo me ahogo y si el médico de emergencia no reconoce los síntomas que son más frecuentes en las mujeres, puede indicar que le pongan oxígeno y luego puede darle alta para que vaya a casa”, comenta la experta.
Ella también señala que las mujeres suelen padecer este tipo de enfermedades de una forma silenciosa, pues tienen una gama de síntomas inespecíficos y hasta atípicos como son: palpitaciones, mareos, dolores en la boca del estómago, en la mandíbula y en el brazo izquierdo. Aun así, eso no quiere decir que no presente dolor precordial (dolor o malestar en el pecho).
Además, la prueba de troponina, que se usa principalmente para ayudar a diagnosticar ataques cardíacos puede, en algunos casos, dar un diagnóstico erróneo en la mujer, pues mientras en el hombre las arterias coronarias epicárdicas se tapan en ellas se trata de las arterias chiquititas, por lo que la afección se debe a que la microcirculación se ve comprometida y eso causa el infarto agudo del miocardio por una obstrucción de una arteria no epicárdica, algo que no se puede ver al realizarse un cateterismo. Esta diferenciación ya está avalada en las nuevas guías médicas, nos dice esta doctora que forma parte del Movimiento Go Red for Woman.
Factores de riesgo y prevención
Las mujeres gracias a los estrógenos, progesterona y andrógenos suelen tener una mayor salud cardiovascular a diferencia de los hombres, por eso desde la primera menarquia que puede llegar a los 10 u 11 años promedio, hasta los 50 años hay una especie de período en que el corazón está protegido, pero por supuesto existen enfermedades y malos hábitos relacionadas a los problemas cardiovasculares.
El cardiólogo Marcos Ortega, del Instituto Cardiológico de Clínica Milenium (Incarvasc) señala que la hipertensión, la diabetes, la dislipidemia que es la concentración elevada de colesterol y/o triglicéridos, la enfermedad renal crónica, el síndrome metabólico, el tabaquismo, el sedentarismo, el sobrepeso y la obesidad son importantes factores de riesgo.
Por ello advierte que el estilo de vida, con una buena alimentación, así como con actividad física diaria son la respuesta preventiva a las enfermedades cardiovasculares, así como es importante cuidar no sufrir de hipertensión.
En el congreso también se dio a conocer que una investigación demostró que un nuevo medicamento del grupo de los GLP-1, semaglutide, podría ser de ayuda para los pacientes con obesidad e insuficiencia cardiaca. Pero esto siempre bajo supervisión médica.
Otros problemas relacionados
El doctor Ortega también indica que hay que cuidar la salud emocional, bajar el estrés y la ansiedad, porque ante situaciones de estrés nuestro organismo responde con liberación de ciertas sustancias adrenérgicas (adrenalina) que hacen que la presión arterial se suba y que las palpitaciones del corazón aumenten, algo que puede ser mucho más riesgoso al haber enfermedades preexistentes.
Por su parte la doctora Delgado, quien es representante de la Sociedad Interamericana de Cardiología indica que también hay factores de riesgo propios y específicos de la mujer, como los que están vinculados con las alteraciones de sus hormonas: menarquia y menopausia precoz, trastornos hipertensivos del embarazo, síndrome de ovario poliquístico, así como también factores de riesgo emergentes, como la cardiotoxicidad en mujeres que recibieron quimioterapia y radioterapia por cáncer de mama.
Exámenes de diagnóstico
El doctor Carlos Ruiz, quien tiene más de 12 años de experiencia en salud pública señala que el uso de exámenes de laboratorio como la medición en sangre de NT ProBNP, son una puerta de acceso para un diagnóstico temprano, sobre todo en el caso de los pacientes con diabetes tipo II, debido a que a esta enfermedad se le arraigan otras enfermedades relacionadas con el deterioro de la visión, la función renal y además de las complicaciones cardiovascular como la insuficiencia cardiaca y el infarto de miocardio.
Y es que este tipo de biomarcadores, según indica este gerente médico de Roche diagnóstica de Ecuador y Perú, indica tempranamente estrés cardiaco (estiramiento de las células del corazón llamados cardiomiomicitos). En casos de que la prueba resulte anormal el médico puede resultar exámenes especializados como el ecocardiograma.
El doctor Ruiz señala que esta prueba de laboratorio no solo ayuda a diagnosticar la falla cardiaca, sino que a través de ella se puede evaluar la gravedad de la enfermedad y monitorear su progresión con el paso del tiempo. Y a quienes se sugiere realizarse es a pacientes con signos y síntomas que podrían deberse a insuficiencia cardiaca.