La enfermedad inflamatoria intestinal puede afectar más que los intestinos: un experto explica cómo
Más de 10 millones de personas alrededor del mundo viven con la enfermedad inflamatoria intestinal (EII), una afección crónica que causa inflamación en el tracto digestivo, pero también puede afectar otras áreas del cuerpo.
Las personas a menudo asocian la EII con episodios de diarrea, pero se trata de una enfermedad grave y crónica cuyos otros síntomas pueden incluir sangrado rectal, fatiga, pérdida de peso y dolor de estómago y articulaciones. El Dr. Victor Chedid, gastroenterólogo de Mayo Clinic, comparte detalles sobre la EII y consejos para gestionar sus síntomas.
Los dos tipos principales de la EII son la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. "La colitis ulcerosa solo afecta y causa inflamación en el colon, mientras que la enfermedad de Crohn puede afectar varias partes del sistema digestivo, desde la boca hasta el ano", explica el Dr. Chedid.
Para algunas personas, la EII es solo una enfermedad leve. Para otros, es una condición debilitante que puede conducir a complicaciones que amenazan la vida. Es probable que se produzcan períodos con la enfermedad activa seguidos de períodos de remisión.
No hay cura para la EII. Anteriormente, la dieta y el estrés eran sospechosos, pero ahora los médicos saben que estos factores no causan la EII, pero pueden empeorarla. Una posible causa de la EII es un mal funcionamiento del sistema inmunitario. Cuando el sistema inmunitario intenta combatir un virus o bacteria invasora, una respuesta inmunitaria atípica hace que el sistema inmunitario ataque también las células del tracto digestivo.
Varias mutaciones genéticas se han asociado a la EII. La herencia también parece desempeñar un rol, ya que es más común en personas que tienen familiares con la enfermedad.