Deportes tradicionales y ancestrales del Ecuador
En el parque La Dolorosa, en la ciudad de Riobamba, cada fin de semana se puede observar a grupos de adultos mayores jugando “La Mamona”, un deporte tradicional que consiste en tomar una pelota pequeña hecha de cuero y lanzarla por los aires con la mano hacia el espacio del equipo rival, algo parecido al tenis, pero con la mano. Aunque para muchos espectadores este es un juego nuevo, para otros es un recuerdo de su infancia cuando lo jugaban con sus padres, primos, hermanos o tíos y que no quieren que se pierda como muchos otros deportes que se han ido quedando en el olvido.
RECONOCIENDO LOS JUEGOS
Pues, al igual que La Mamona, existen más deportes o juegos tradicionales y ancestrales del Ecuador que buscan un reconocimiento y un resurgir entre las nuevas generaciones. Pero ¿cuáles son estos deportes? Y lo más importante ¿cómo se los reconoce? Conversamos con Nelly Romero Jara, Gestora Cultural y representante de los Juegos populares de Riobamba. Ella nos explica que los deportes tradicionales son aquellos que se practican en cualquier pueblo, país, región y pueden ser poseedores de conocimientos tradicionales, independiente de los pueblos indígenas.
“El origen de los deportes tradicionales en Ecuador es similar a toda Latinoamérica ya que fueron traídos desde España en la época colonial, razón por la cual tienen muchas similitudes a lo largo de Hispanoamérica con ligeras variantes”, puntualiza. Añadiendo que los deportes ancestrales forman parte de los pueblos y nacionalidades indígenas, montubias y afros que constituyen una conexión con su sistema de vida y que hace que se diferencien de otros pueblos.
PRESENTES EN EL TERRITORIO
Para entender mejor a qué deportes nos referimos, la especialista nos da algunos ejemplos. “Los deportes tradicionales que más se practican están la Pelota Nacional o Chaza, el Palo Ensebado, Rayuela, Ollas encantadas, Trompos, Canicas, Ensacados, Pepos, Cocos, Ecuavoley... entre otros más”. Y existen algunos que son propios de cada lugar como Los Cabes (trompos gigantes) que se juega en Tabacundo, Pichincha; Lidia de gallos en los pueblos Montubios, El Rodeo Montubio, El Gallo Compadre que se realiza en el carnaval de Guamote, Chimborazo, o El Chancho engrasado en Quevedo.
Mientras que en los deportes ancestrales podemos encontrar el Juego de Cuchunchi, de la comunidad Quilloac, Cañar; Pelar el verde con los dientes en las provincias de Santo Domingo y Esmeraldas; Juego de la lanza, Chaskina, Cerbatana, Waysapuru, Chasqui se practican a lo largo de la Amazonía ecuatoriana entre los pueblos indígenas.
FORTALECIMIENTO DE LA CULTURA
Estos juegos, que constituyen una herencia patrimonial, “son mecanismo de valoración cultural y fortalecimiento de las relaciones sociales dentro de los pueblos y nacionalidades”, recalca la experta, porque son parte fundamental en el proceso de transmisión de saberes. Los juegos ancestrales marcan el vínculo y la interacción entre el ser humano y su entorno, mejorando los lazos de hermandad, convivencia, solidaridad y reciprocidad entre los miembros de cada comunidad.
La transmisión básica de estos deportes es a través de su práctica que permite el conocimiento, las reglas básicas y el entorno del juego. “Si las nuevas generaciones no practican el juego este tiende a desaparecer”, recalca la gestora cultura, indicando que se están perdiendo debido a la falta de práctica e interés de los mismos, “antes se podían ver estos juegos en los patios escolares, en la hora de educación física, pero hoy se han concentrado en prácticas de deportes como fútbol, básquet, atletismo. Por eso es importante la participación del Ministerio de Educación en la recuperación de los juegos tradicionales para mantenerlos en las mallas educativas”.
UN COMPROMISO SOCIAL
Y en esta ardua tarea por no perder los juegos tradicionales y ancestrales del país, los ministerios de turismo y deporte ya han dado sus primeros pasos al realizar, en años pasados, ediciones de “Juegos ancestrales, autóctonos tradicionales y populares de los pueblos y nacionalidades del Ecuador”. Actividad que cumple un papel importante en la conservación y difusión de los juegos, porque con el encuentro de distintas delegaciones de las nacionalidades se ha incentivado a que los más pequeños y los turistas conozcan esta riqueza nacional. Además, estos deportes fortalecen el reconocimiento de su cultura o de sus saberes, y esto provoca que los niños y niñas se apropien de este sentimiento de pertenencia y valoren su identidad.
No obstante, el compromiso de toda la sociedad también es fundamental para que las nuevas generaciones sean partícipes y conocedoras de estos juegos. “Existen varias formas de fomentar estos deportes primero en la etapa escolar colocando en la malla educativa los juegos tradicionales y ancestrales, y luego la organización de más encuentros en las comunidades, ciudades y provincias que permitan el reconocimiento de cada uno de sus juegos”, aconseja la especialista, resaltando que la herramienta más efectiva para que los juegos tradicionales y ancestrales puedan seguir compartiéndose es solo a través de la práctica, en los espacios públicos, parques, escuelas.
LOS MÁS CONOCIDOS
En nuestro deber por revivir los deportes de antaño te dejamos algunos, con sus reglas e instrucciones, para que puedas compartir con tu familia y amigos.
Palo encebado: En un poste de madera, de unos 5 o 6 metros de altura, unta grasa, aceite, manteca o cualquier sustancia resbalosa. Cuando ya lo hayas bañado, coloca en la parte más alta del poste un objeto representativo del premio que se le cambiará al ganador al lograr escalar todo el palo. El objetivo es que el jugador pueda subir a lo más alto.
Reglas: Cada jugador intentará subir al palo utilizando sus propios medios físicos, es decir, únicamente sus brazos y piernas. Si el jugador resbala y toca el suelo queda automáticamente eliminado y se le da la oportunidad a otro jugador. Si el jugador logra tocar el objeto colocado en lo más alto del poste, se le declarará como ganador y podrá reclamar el premio.
Carrera de carretillas: Organiza a todos los participantes en parejas. Uno será el cargador de la carretilla y otro la “carretilla humana” para la carrera. Una vez estén organizados, alinéalos en el punto de salida y el participante que será la carretilla debe permanecer acostado frente a su pareja que cargara sus pies. Cuando se indique la salida, los jugadores que están de pie deben coger por ambas piernas a su pareja y caminar lo más rápido que puedan hasta la meta. Cuando lleguen a la meta deberán de cambiar de posiciones y regresar al punto de salida. La primera pareja que complete el circuito gana.
Reglas: La persona que esté de carretilla nunca deberá tocar el suelo con ninguna otra parte de su cuerpo. El cargador en ningún momento podrá soltar los pies a su pareja. El intercambio de papeles se realiza únicamente en línea.
Los ensacados: Conseguir costales para los participantes que van a competir, colocar a los jugadores en dichos sacos y alinearlos en la línea de salida. Al escuchar o ver la señal de partida, los participantes deberán saltar dentro de los costales hasta la meta. El ganador será el primero en llegar.
Reglas: Si el jugador saca un pie o se cae de su costal queda eliminado. Únicamente está permitido saltar dentro del saco y no intentar caminar con él.
